Saúl Ñíguez ha compartido detalles sobre su difícil proceso de recuperación durante su cesión por una temporada en el Sevilla, un momento clave en su carrera.
El internacional español, que se unió al Sevilla para revitalizar su trayectoria en La Liga, ha enfrentado contratiempos, incluido una lesión de cadera que lo ha mantenido fuera de juego desde mediados de septiembre.
En declaraciones a Marca, el jugador de 30 años describió este período de recuperación como el más difícil de su carrera. Reconoció que la salud mental jugó un papel crucial en sus dificultades:
“Cuando entrenamos en el estadio antes del derbi, lo pasé mal. Pedí hacer parte de la recuperación en Madrid porque no estaba bien mentalmente. El descanso me vino bien, ya que extrañaba al equipo, y lo importante es seguir aportando desde las gradas o el banquillo”.
Saúl destacó su compromiso de mantenerse cerca de sus compañeros:
“Mi intención siempre fue estar lo más cerca posible de mis compañeros. Me siento mucho mejor; cada día que pasa, voy cogiendo más ritmo. Llevo seis días entrenando con el equipo”.
El Sevilla, que se prepara para recibir a Osasuna en La Liga este fin de semana, podría contar pronto con el regreso de Saúl, posiblemente en el partido de la Copa del Rey a mitad de semana contra el Olot.